|
![]() |
Suscríbete ya a la newsletter de Música Clásica |
cultura de supermercado |
| ||||||
Estimados todos: El otro día leí una carta al Director publicada en El País, escrita por D. José M. Sánchez-Verdú, compositor, profesor de composición de la Robert-Schumann-Hochschule de Dusseldorf, el cual me pareció muy interesante, compartiendo plenamente sus opiniones. A continuación lo reproduzco: << Cultura de supermercado El artículo del señor Azúa en EL PAÍS del 10 de noviembre es un ejemplo de la libertad de opinión que una democracia conlleva. Aunque ataque a nombres de la cultura como Schönberg, que son lo equivalente a Mies van der Rohe en la arquitectura, Joyce en la literatura o Kandinsky en la pintura. Es una muestra más de la ignorancia, sobre todo musical, que nos rodea. España cuenta con una cultura musical tan mínima como inexistente pese al reciente crecimiento del número de auditorios, orquestas, óperas etcétera, muchas veces con más pompa y cáscara que con verdaderos contenidos. La formación musical desde la infancia no existe, los conocimientos musicales posteriores son desastrosos, e incluso los estudios superiores de música aún no se rigen por un sistema universitario propio, como en todos los países avanzados culturalmente. La frase ?yo de música no entiendo? es el estigma que lleva casi todo español. No está de más señalar que salvo unos pocos ejemplos (Gerardo Diego, Valente, etc.), en España los intelectuales han estado de espaldas a la música en los últimos decenios, hasta un punto vergonzante si lo comparamos con escritores, poetas o filósofos de otros países (Adorno, Mann, Eco, Kundera, etc.) Es normal que al señor Azúa no le guste Schönberg; con él estará una inmensa mayoría de españoles que no han oído ni su nombre ni su música. Reivindicar el arte de consumo de mayorías como indicador de lo que es bueno es tan banal que no merece respuesta. Todo arte exigente y excelente no es en principio para mayorías, siempre ha sido así. De aceptar las ideas de supermercado de Azúa habría que excluir a Mallarmé, a Joyce, a Mondrian, etc., porque sus propuestas son ?difíciles? y no aceptadas o ?comprendidas? en un inicio por las grandes masas: ofrecen algo que a la vez exige, y por eso no cabe en las ofertas de supermercado. Afortunadamente, siempre existirá un arte de creación comprometido, difícil ? el arte es una forma de transmisión de conocimiento, no sólo de diversión y espectáculo, como parece creer Azúa -. No podríamos aprehender una cultura sin el rigor y compromiso de los creadores que han arriesgado y abierto nuevos caminos. ?Ningún arte, literatura o música estúpidos perdura. La creación estética es inteligencia en sumo grado? (G. Steiner, Presencias Reales). Beethoven fue acusado de hacer ruido, de ser incomprensible; Bach, de ir contra las Leyes de la Música. ¿Dónde estarían los Azúas de entonces? Sin duda, también contra ellos.>> No puedo más que estar de acuerdo con el contenido de la carta. La gente, en España, presume de no tener ni idea de música, incluso se ríen de uno porque escucha música clásica: "¿Qué te gustan las óperas de Wagner?", dicen mientras ponen una cara de alucinados que hubieran visto un marciano. No quiero decir nada si intentas explicar lo impresionado que te ha podido dejar tal o cual acto de una ópera determinada. Incluso cuando acudes a un establecimiento de venta de música, se supone que especializada, y se pregunta por alguna versión concreta de una ópera, o un director determinado, la cara de no entender de qué se le está hablando a la persona encargada de la venta es mayúscula. Imagino que los que viven en grandes ciudades no tienen este problema, pues es de sobra conocido por todos la existencia de establecimientos verdaderamente especializados. Pero en ciudades medianas, como en la que vivo, estos establecimientos brillan por su ausencia. Eso sí, el último disco de Alejandro Sanz ... hasta en la sopa: cultura de supermercado. Saludos. |
| ||||||
Hola Yo también pienso que tiene toda la razón el autor de la carta. Pero no nos ha de sorprender. En mi caso, que me interesa la música clásica a fondo desde los 14 años, sin tener precedentes familiares, los primeros que me miraron como un marciano, fueron mis hermanos. Ya posteriormente, dentro de mis escasos amigos a los que le gusta la música clásica, cuuando les digo que soy gran aficionado a Wagner, me siguen mirando como un marciano (incluso algunos amigos alemanes). Gracias a este foro, y a pesar de la altivez de algunos foreros (por sus comentarios, o por sus silencios) podemos compartir nuestro amor por este autor (el más grande del siglo XIX después de Beethoven) en nuestro idioma. Gracias |
| ||||||
"Es una muestra más de la ignorancia, sobre todo musical, que nos rodea. España cuenta con una cultura musical tan mínima como inexistente" "en España los intelectuales han estado de espaldas a la música en los últimos decenios, hasta un punto vergonzante" Lo más descacharrante de esta historia es que el aludido, el supuesto analfabeto en temas musicales es... pues sí, CRÍTICO MUSICAL en una revista de gran tirada nacional. Bajo seudónimo, se entiende. Espero que nunca le toque comentar un disco de Sánchez-Verdú. |
| ||||||
Jejeje, y entonces... ¿De qué te extrañas, Ángel? |