Repasando papeles he descuberto que hace un par de meses se cumplieron los 40 años de la muerte del gran bajo-barítono alemán Hermann Uhde. Su fallecimiento se produjo en Copenhagen mientras interpretaba la obra Fausto III, a los 51 años de edad.
Uhde fue uno de los puntales del Nuevo Bayreuth, donde intervino de 1951 a 1960. Su Wotan no cuajó, y ni siquiera le ofrecieron el papel de Amfortas, que si cantó en el Met. Pero en otros personajes incluso hoy continúa siendo el mejor.
Su Klingsor no sonaba inicialmente malvado como el de otros cantantes, pero en un par de frases conseguía mostrarnos el profundio odio que albergaba en su interior. Su Gunther era un ser débil que sólo en ocasiones demostraba su nobleza, igual que su Telramund, dominado por su esposa. Y su Holandés era el único que no lanzaba su monólogo contra Dios o el mundo, sino que en él se interrogaba, desde el más profundo hastío.
También cantó bastante Mandryka, el Gran Inquisidor o el Creonte de la Antígona de Orff, pero quiero destacar una grabación que circula por ahí: fue Wozzeck en el estreno de la obra en el Met (1959), con Böhm en el foso. Las representaciones se dieron en inglés (sin problema para Uhde, pues su madre era norteamericana), pero creo que el documento es importantísimo, y
su Wozzeck referencial.
Un recuerdo, por tanto, para este gran intérprete.
Saludos.
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Número 276 - Zaragoza - Diciembre 2023
