Pues estuvo sorprendentemente bien. Buena orquesta, no perfecta pero muy atenta y conjuntada. Eschenbach estupendo, sin cosas personalísimas pero dando mucho color y brío (y a veces estruendo). Impresionante el volumen de Jon Fredric West, ganador nato de la función, aunque lo pague en otros sitios y la concepción del personaje (evidentemente no suya) sea tipo dibujo animado y tenga poco que ver con lo que pide el texto. Estupendo Leiferkus, sobrio e intencionado como Alberich, y más discutible el Mime de Vogel, demasiado refinado y amanerado para mi gusto. Muy bien Nikitin como Wanderer, de técnica impoluta aunque le falte un pelo de volumen e intención (tiene 33 años). Mal Sergueyeva, una lírica regularcilla que no tiene nada que hacer en el papel de Brünnhilde, que canta porque es alta, rubia y no hay muchas más que se atrevan. Pasable el resto. Muy buena función para lo que puede encontrarse por ahí.
Saludos.
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