Cuando lo leí, me extrañó que no entrara en el tema de que ella se encargue del próximo Parsifal, lo cual es MUY sospechoso.
Es como si dicen "el director muniqués Christian Thielemann le clavó la batuta en el ojo al trompeta primero, por entrar tarde", y entonces sale una noticia del festival diciendo "Perdonen, pero Thielemann no es muniqués, sino berlinés" y se callan sobre el trompeta primero.
Wolfgang Wagner y su mujer se han pasado aquí de listos, queriendo colar a la hija en primera fila. Se les ha notado demasiado. Y me da que la biznietísima no va a estar a la altura. Con todas las intrigas familiares que tiene y siendo la más joven (dejando aparte su mayor o menor talento), lo va a tener muy difícil. Aparte, el evidente favoritismo con el yernísimo, Endrik Wottrich, tampoco juega a su favor.
Un saludo.
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