Apreciados foreros,
Aprovecho desde aquí para expresar mi indignación por lo que la OBC (orquesta de Barcelona y nacional de Cataluña) está haciendo con el veterano director Franz Paul Decker, principal director invitado por la orquesta. Le avalan muchos años de experiencia y trabajo. Un maestro de los de antes, de la vieja escuela. Lo que otrora le ocurriera al mas que solvente Lawrence Foster, antiguo titular de la OBC, ahora parece repetirse con el octogenario director alemán. El hecho de negarle a Decker un concierto por el que pueda despedirse del público catalán me parece una vergüenza, una grave falta de respeto hacia el público y hacia un director que a fin de cuentas lleva trabajando y mejorando la orquesta practicamente desde sus inicios. Lawrence Foster y Franz Paul Decker, dos directores que han levantado a la orquesta, la han mantenido a flote y que la han llevado hacia donde ahora está: como una buena y mas que solvente orquesta de segunda, no serán fácilmente olvidados por su público - un público que les recordará y añorará- , pero si suciamente prescindibles y reciclables por parte de la organización de la orquesta.
Los buenos momentos no se olvidaran. Estos ilustres directores, como Foster y ahora Decker, merecen todo el apoyo de su público, el único que puede lograr que las cosas cambien. Una orquesta sin público no es una orquesta.
Saludos a todos.
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