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Anecdotario |
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Leído en un foro amigo y trasladado directamente aquí. "Hola, buenos días! Mi amigo el barítono Franz Grundheber, que tanto había cantado en el segundo Liceo --CARMEN, TRISTAN, LA TRAVIATA, CAPRICCIO, HOLLÄNDER...--, ha vuelto después de 17 años con la voz más gloriosa que nunca. Tiene 73 años, los pelos, muchos, bastante negros aún y muy rizados, y con una voz espléndida, insólita en un hombre de edad. El otro día estábamos hablando. Me gusta hablar con él y él tampoco tiene muchas gente con quien hablar. Le explicaba yo, que soy también algo viejo, que había visto el famoso Ludwig Weber, una de los más grandes bajos de todos los tiempos, famoso Ochs en Viena y Gurnemanz en PARSIFAL, cantando el ROSENKAVALIER en el Liceo en 1957. Y de Ludwig Weber me contó una anécdota. El señor Ludwig Weber, vienés, era famosíssimo en su ciudad. No podír ir por la calle o a un restaurant sin que no le pidieran autógrafos y fotos. Una vez tomó un tren y se fue a Salzburg, en primera clase, claro. En el vagón sólo había una señora de aspecto respectable que leía un libro. Weber se le acercó, le sonrió, y ella lo miró con cara de sorpresa pero continuó leyendo. Weber, que se sintió reconocido, repitió la sonrisa y para aclararlo dijo "Weber". La mujer lo miró algo alarmada. Y él concretó: "Wiener Staatsoper". Así seguro que ella lo situaría. Weber se dio cuenta que la mujer ya no leía, sólo evitaba mirarlo. Entonces se le puso delante, miró al suelo y dijo: "Usted no ha visto nunca mi Gurnemanz?" Y ella saltó: "Cuidado con lo que me enseña porque disparo el freno de alarma del tren". Un saludo" |
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¡Magnífica anécdota! Muchas gracias por enviarla, Fátima. En estos tiempos que corren, menos dados al sentido del humor, a Ludwig Weber lo hubieran llevado directo a la comisaría, donde probablemente nadie tendría idea de qué demonios quería decir el buen hombre con lo de ’su Gurnemanz’. Saludos, Der Niblungen Herr |
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Jejejeje, qué bueno. ¡Si supiera que hoy día efectivamente se suele enseñar el Gurnemanz en algunas puestas en escena! Un abrazo. |
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hola: dos cosas, leia en una entrevista a kaufmann que se le propuso salir desnudo en una puesta en escena ( de bieito ??, no lo dijo ), se nego, miedo a que conocieran su gurnemanz, algun dia, mas adelante tal vez, cuando se sienta preparado ??. lo otro, hace tiempo grundheber canto un excelente scarpia en chile, lo mejor de esa tosca, lejos. tiempo que no escuchaba su nombre. saludos. K. |
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teniendo en cuenta que kaufmann ya se siente "preparado" para asumir wagner. |
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Yo sé más de uno y de una que se desmayaría sólo con la remota posibilidad de verle el Gurnemanz a don Jonas. En fin, no sé si se ha hablado mucho por aquí sobre Kaufmann (nótese la fina ironía), pero la verdad es que yo soy bastante escéptico en lo tocante a sus cualidades. Me refiero, claro, a las estrictamente canoras. Sólo le he visto una vez, en Baden-Baden el año pasado como el tenor italiano de aquel soberbio ’Rosenkavalier’ dirigido por Christian Thielemann que circula en deuvedé. Me pareció una voz importante, muy ancha y voluminosa, aunque bastante en la gola. Sólo corría fenomenanlmente bien en el agudo, lo que tampoco es desdeñable. Lejos de la pésima técnica de un Cura o un Villazón, no sé si la de Kaufmann le permitirá no cargarse la voz en menos de un lustro, y no sé cómo le irá en otros papeles más largos, pero no rechazaría yo una entrada para verle el Lohengrin en Bayreuth. La lástima es que no se le emparejara finalmente con la Elsa de Anna Netrebko, una voz magnífica y las mejores piernas de la historia de la ópera, a quien muchos también gustaríamos de verle el Gurnemanz, aunque fuera de lejos. Un saludo a la parroquia, Der Niblungen Herr |
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¡¡Qué alegría volverte a leer, Nibe!! ¡¡Bienvenido de nuevo!! ¡Un abrazo! |
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Encantado de volver por aquí, siempre que la ocasión lo merezca. ¡Y la anécdota del Gurnemanz de Ludwig Weber lo merecía mucho! ¡Un abrazo también para ti! |
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Me pregunto qué aspecto tendrían el resto de las señoras del vagón. |