Hombre, un sitio en concreto en internet no sabría decirte, excepto esta misma página en la sección de Leitmotivaciones: si buscas en esa sección, en meses atrasados, está ahí analizado el preludio.
No se a que nivel vas a hacer el trabajo ni los medios que tienes a tu alcance. En los tratados de Armonía de Schönberg y Deither de la Motte se habla del algo del tema, por ejemplo.
Puedes buscar también en libros de historia de la música.
Trataré de resumirte lo fundamental: En lo que a la armonía se refiere, la principal aportación está en el uso de los acordes por cuartas (Acorde de Tristán) que al oído son más ambiguos e inestables que los tradicionales acordes por terceras, esta ambiguedad es lo que abre la puerta al atonalismo de Schönberg y su escuela y al de Alexander Scriabin: el acorde de Tristán puede pertenecer a varias tonalidades a la vez, y puede desempeñar diversas funciones tonales, según lo que le siga y lo que le preceda, esto, además de disminuir enormemente los contrastes tensión-distensión, que son la base de la armonía tonal, abre muchísimas posibilidades para hacer modulaciones imprevistas a tonos lejanos, lo cual hace que haya momentos en los que el oído no sabe a ciencia cierta en que tono estamos y si está en tensión o reposo. La armonía de Schönberg y Scriabin consiste en esto mismo llevado al límite, de hecho, Schönberg rechazaba el término "atonal", prefiriendo el de "pantonal" (en todos los tonos), es decir, para el su obra más que no tener tono estaba en todos a la vez, como consecuencia de la ambiguedad wagneriana llevada al extremo. En cuanto a Scriabin, si coges los Preludios Op.74, por poner un ejemplo, ves que se basan exactamente esto.
La otra aportación, es un contínuo cromatismo melódico (que favorece la llamada "melodía infinita", pero eso ya se sale del estudio de la armonía, tendría que ver mas con la forma musical), íntimamente relacionada con lo anterior, que además de ser tremendamente sensual (dicho sea de paso), refuerza mas la contínua ambiguedad tonal. En realidad los acordes por cuartas y el cromatismo son dos caras de la misma moneda, ya que los encadenamientos de este tipo de acordes favorecen el cromatismo en la marcha de las voces. Por supuesto, en Scriabin y Schönberg también es muy se encuentra esto último de contínuo.
Saludos y suerte con el trabajo.
P.D.-Donde digo Schönberg se puede decir también Berg y Webern, pero es por no escribir tanto por lo que lo indico aquí.
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