El contrato de Gerard Mortier con el Teatro Real de Madrid finaliza en 2016, y hasta entonces, el director belga quiere apostar por la música de Wagner, que no se ha podido escuchar mucho bajo su mandato. De hecho, tras llegar a Madrid en 2010, tan solo esta temporada ha podido escucharse una ópera de Wagner, Rienzi, y en versión concierto.

Ahora, con el bicentenario a la vuelta de la esquina, Mortier ha querido incorporar más música de Wagner y ya trabaja en la representación de cuatro de sus óperas de aquí a 2016, fecha en la que dirá adiós a su etapa en el Real.

El primero de los títulos será Parsifal, en versión concierto, tras un acuerdo con el Festival de Pascua de Salzburgo y la Berliner Philharmoniker dirigida por Simon Rattle. Será en 2013. El acuerdo con la prestigiosa orquesta alemana se prorrogará dos años más, en las que podrá disfrutarse de Salomé y Carmen.

En 2014 serán dos los títulos wagnerianos, Tristan e Isolda y Lohengrin. El primero de ellos corresponde a la videográfica producción de Peter Sellars y Bill Viola estrenada en París en 2005, que contará en Madrid con la dirección musical del griego Teodor Currentzis. Por su parte, Lohengrin será una nueva producción del Teatro Real realizada por Alexander Polzin y con dirección musical de Hartmut Haenchen.

Y para terminar, ya en 2016, Mortier cerrará su apuesta por Wagner con Los maestros cantores, con un elenco previsto encabezado por Michael Volle (Hans Sachs) y Michael König (Walter Stolzing).

junio 2012