El Centro de Documentación de Partido Nazi de Núremberg acoge desde el pasado 15 de junio y hasta el próximo 3 de febrero de 2019 una exposición que muestra la relación entre Adolf Hitler y la ópera. La muestra lleva el título “Hitler.Macht.Oper”, jugando con la polisemia de “Macht”, que en alemán significa “hace” y “poder”.

Junto a su ministro de Propaganda, Joseph Goebbels, Hitler entendió muy pronto que podía utilizar la música, el teatro, el cine y, sobre todo, la ópera, para ensalzar sus ideales.

Los Maestros Cantores de Núremberg, única ópera cómica del Wagner de madurez, representaba para el régimen “la más alemana de todas las óperas”, en la que veían la exaltación de la patria y la raza alemana. En la arenga final, su protagonista, Hans Sachs, alerta: “El diablo nos amenaza: si los alemanes decayeran [...] bajo un reino [...] extranjero, [...] nadie sabría ya lo que es alemán puro”.

La música de Los Maestros puede escucharse en "El triunfo de la voluntad" (1935) en la que la directora Leni Riefenstahl documentó el congreso del partido nazi del año anterior en Núremberg. Ese mismo 1935, una representación de la comedia de Wagner fue interpretada en la ciudad francona por un elenco de cantantes elegidos por el propio Hitler y con una épica dirección escénica del arquitecto del régimen Benno von Arent.

Wagner fue el compositor favorito de Hitler, después de que el dictador se quedara fascinado tras asistir con tan solo 12 años a una representación de Lohengrin. En esta ópera, su protagonista canta al final del tercer acto que “¡Nunca, ni tan solo en el futuro más lejano, las huestes del Este se alzarán victoriosas contra Germanía!”, un controvertido pasaje que se ha omitido en la recién estrenada producción de 2018.

La exposición se agrupa en siete temas distintos con títulos como "Los Maestros Cantores", "La ópera" y "El ocaso de los dioses".

agosto 2018