El pasado 26 de julio tuvo lugar la final de Operalia, el concurso de canto creado por Plácido Domingo en 1993 para reconocer el talento de nuevos cantantes del mundo de la lírica.

Dentro de las categorías del concurso, destaca el premio Birgit Nilsson, creado en 2010. Dotado con 15.000 dólares, Domingo decidió incorporar esta categoría después de recibir el año anterior, en su primera edición, el “Premio Birgit Nilsson”, dotado con un millón de dólares, por expreso deseo de la cantante sueca.

En la edición de 2019, celebrada en Praga, este premio ha sido repartido entre la soprano americana Felicia Moore, quien interpretó a Elsa en un fragmento de Lohengrin, y la también soprano sueca Christina Nilsson, que nada tiene que ver con su compatriota que da título al premio. El pasado año, Nilsson cantó en la entrega de los Premios Nobel, en Estocolmo, interpretando “Dich teure Halle”, del segundo acto de Tannhäuser.

En 2015, el premio Birgit Nilsson fue a parar a manos de la soprano noruega Lise Davidsen, que se llevó, además, el premio de la audiencia y el primer premio de ópera. Davidsen, a sus 32 años, ha sido una de las revelaciones del Festival de Bayreuth de 2019, al debutar con gran éxito como Elisabeth en Tannhäuser.

Fuera ya del ámbito wagneriano, el joven tenor español Xabier Anduaga, de tan solo 24 años, se alzó con el primer premio, junto a la soprano guatemalteca Adriana González. Anduaga, que también se llevó el premio a mejor cantante de zarzuela, se atrevió con la muy exigente aria  “Ah! mes amis, quel jour de fête!”de “La hija del regimiento” de Donizetti.

agosto 2019