Uno de los sectores que más ha sufrido las consecuencias económicas de la pandemia ha sido el de la cultura, y sobre todo el de las actuaciones en directo, debido a las suspensiones de conciertos y festivales por todo el mundo.

El tenor Stefan Vinke, habitual en el Bayreuth de las últimas temporadas desde su debut como Tristán en 2011, y su esposa, la también cantante Sabine Vinke, vieron como todos sus compromisos artísticos en 2020 y buena parte de 2021 se iban cancelando.

Por eso, el pasado verano idearon un proyecto que ha tenido continuidad también en este 2021: hacer representaciones wagnerianas en el propio jardín de su casa en Hargesheim, a unos 40 kilómetros de Maguncia, la capital del estado de Renania-Palatinado.

En todos los casos se trata de adaptaciones o de actos sueltos, de en torno a una hora, y con acompañamiento para piano. Así, entre julio y agosto se van a representar en diferentes conciertos el primer acto de Sigfrido, el primero de La Walkyria, una adaptación infantil de Lohengrin, y una reducción de Tannhäuser. Todo ello para un total de 14 funciones, lo que le convierte en un mini Festival de Bayreuth.

Stephan Vinke ha conseguido atraer a su encomiable propuesta a otros compañeros de Bayreuth como Alejandro Marco Buhrmester, Claudia Mahnke, Thomas Jesatko o Paul Kaufmann.

Las condiciones acústicas no son las ideales para una representación de ópera, pero al medio centenar de aficionados que pueden asistir a cada función no les importa sentarse en sillas de plástico o estar junto a la piscina familiar. Previo pago de una entrada de 35 €, pueden compartir una velada musical con los Vinke, que se prolonga después de la actuación con unos pequeños aperitivos.

La casa familiar se encuentra en una ubicación muy musical: la calle Mozart, 19, de Hargesheim.

agosto 2021