El
20 de agosto de 1830, Minna y Richard alcanzan la
costa francesa de Boulognesur-Mer tras una larga y
tortuosa travesía que les había llevado
desde Prusia hasta Francia, pasando por Londres y
las costas holandesas. Wagner diría años
después en su autobiografía que "al
despedirnos del mar, lo hicimos con el ferviente propósito
de no volver a navegar jamás por él".
|